Hablamos en este caso de tu primer tabla de surf propia, lo que implica que ya  has practicado surf algunas veces ya. Empecemos por lo básico a tener en cuenta para ello: tu peso, tu altura, tu habilidad innata (y aquí hay que ser sinceros con uno mism@), y la frecuencia con la cual practicaras este hermoso deporte.
Entonces si vamos a elegir una tabla cuando venimos de unas pocas experiencias en tablas de espuma, lo primero es saber si quieres seguir avanzando poco a poco en una tabla de espuma o ya quieres pasar a una tabla rígida, lo que implica que te será mas difícil al comienzo pero con  una buena frecuencia en tu practica y tenacidad lo lograras dominar.
​

La elección de la primera tabla de surf es una tarea importante para cualquier principiante en este deporte. Aunque pueda parecer abrumador debido a la amplia variedad de formas, tamaños y materiales disponibles, hay algunos factores clave que deben considerarse antes de tomar una decisión.
En primer lugar, como dijimos es importante tener en cuenta el nivel de habilidad del surfista. Si eres un principiante completo, es probable que necesites una tabla más grande y estable para ayudarte a mantenerte equilibrado mientras aprendes a remar y ponerse en pie. Una tabla más grande también será útil para tomar olas más pequeñas y lentas, lo que te permitirá practicar tus habilidades sin sentirte intimidado por olas grandes y poderosas.
Otro factor a considerar es tu peso y altura. Una tabla demasiado pequeña o estrecha puede ser difícil de equilibrar si eres un surfista más pesado, mientras que una tabla demasiado grande puede ser difícil de manejar si eres más bajo y ligero. Por lo tanto, es importante encontrar un equilibrio adecuado entre la longitud, anchura, volumen de la tabla y tu peso, altura y habilidad.
​
El tipo de ola que se encuentra en tu área local también puede influir en la elección de tu primera tabla. Si vives en un lugar con olas pequeñas y lentas, una tabla más grande y estable puede ser más adecuada. Si, por otro lado, estás cerca de olas más rápidas y potentes, es posible que desees una tabla más pequeña y maniobrable para aprovechar al máximo la velocidad y la energía de las olas. Es evidente que buscaremos olas fáciles para comenzar nuestra aventura en el surfing.
Finalmente, es importante considerar la calidad de la tabla. Una tabla de mala calidad puede ser difícil de surfear y puede romperse fácilmente, lo que puede resultar en costosos reemplazos. Si bien puede ser tentador optar por una tabla más barata para tu primera tabla, es importante invertir en una tabla de calidad que te durará más tiempo y te brindará una mejor experiencia de surf.
En resumen, la elección de tu primera tabla de surf es un paso importante en tu viaje como surfista. Al considerar tu nivel de habilidad, peso y altura, el tipo de ola en tu área local y la calidad de la tabla, estarás en el camino correcto para encontrar una tabla que te ayude a aprender y disfrutar del surf de manera segura y efectiva.

                  Historia repetida: Ya has participado en tus primeras clases de surf, incluso ya has tenido tus sesiones de surf tu solo o con amigos, con una tabla prestada o la que has alquilado en el surf shop mas cercano a la playa. Ya te sientes  listo para dar un paso mas y comprarte tu primer tabla de surf para ti! Y dejar ya de pedir al amig@ o de seguir alquilando.
Pasas a querer dar el siguiente paso para convertirte en un futuro surfista hecho y derecho, porque ya sabes que te gusta el surf, incluso te apasiona y quieres pasar mas tiempo realizando este deporte/pasión. Entonces empiezas con la búsqueda online en diferentes paginas de venta de artículos de segunda mano, seguramente solo y sin ningún tipo de ayuda que te pueda asesorar sobre el tema. Estas impaciente por tener tu primer tabla! De repente ves un precio imbatible, una forma de tabla que te invita a ser un surfista de verdad y es una 6'8" como la que alquilaste aquella vez que te fue tan bien.
Tus ojos se iluminan y sales disparado en busca de esa tabla antes de que otro llegue y se la lleve.
Quedas con el vendedor en un punto X, el vendedor en este caso es un surfista mas experimentado que tu, sin ningún tipo escrúpulos y con ganas de vender su tabla... aunque no sea lo que el comprador necesite. Después de una rápida conversación con el vendedor y escuchar las alabanzas que este dirige al trozo de fibra de vidrio que vende como la tabla ideal para cualquiera y para cualquier ola, no te lo piensas mas y pagas esa ganga de precio que pide y te la llevas con una sonrisa que desfigura tu cara de felicidad!
​

Hasta aquí todo bien... lastima que al llegar a la playa te encuentras con quien fue tu monitor de surf o quizás con un amigo mas experimentado que tu y de inmediato muestras tu nueva adquisición que tanta felicidad te esta dando y no puedes esconder la euforia. Del otro lado, que tienen experiencia, te miran con cara de compasión, con una expresión que no comparte tu felicidad radiante... has sido engañado. La 6'8" que tanto esperabas te de alegrías solo te dará problemas para acostarte sobre ella y remar, para sentarte en la tabla y esperar una ola y ni hablar de ponerte de pie. Porque es una tabla extremadamente angosta y fina, datos que no tuviste en cuenta a la hora de elegir y tampoco el vendedor quiso proporcionarte por miedo a que no la quieras comprar. Claro que toda esa alegría en tu cuerpo y espíritu no se disipa fácilmente con las opiniones ajenas y no dejas que maten tu ilusión, entonces haces oídos sordos y te vas al agua a probar tu mismo esta 6´8" que has comprado a tan buen precio!
Y es solo ahi que te das cuenta que has sido engañado, aunque has explicado que surfeas hace poco y que es tu primer tabla. Te han vendido algo que no te sirve para este momento de tu vida y posiblemente para ningún otro momento futuro. Te has comprado una tabla con unos cuantos años ya y que es para un nivel altísimo y para olas potentes y tu llevas un par de meses surfeando...  Y ahora? Nada que hacer, el vendedor se esfumo y desapareció del mapa y no contesta. Y tu te quedas con la profunda sensación de haber sido engañado, además de quedarte mirando la 6'8" parada en la esquina de tu cuarto buscando un sentido de uso para esa tabla que no solo no te va a permitir surfear sino que te matara el sueño de convertirte en un surfista sino te compras otra acorde a lo que en verdad necesitas...

Moraleja de la historia: pide ayuda a alguien que conozca del tema y si puede ser que te conozca a ti también: que sepa tu nivel, que sepa de surf y que quiera ayudarte y no solo vender su tabla. 
Buscar por internet puede provocar mareos entre tanta información que no va dirigida a ti especialmente. Ve a Tiendas y siente si en verdad quieren ayudarte o solo quieren vender.

Si te interesa saber algunas pautas basicas para elegir tu primer tabla te dejamos otro post de nuestro blog para ir mas orientad@ sobre el tema:
como-elegir-tu-primera-tabla-de-surf.html
​